En este sencillo puerto donde desembarcaban los antiguos dueños de estas tierras, se realizaba la conexión de la Península BATIPA con otro puerto cercano en tierra firme llamado “Punta de Tierra”. Aquí se realizaba el trasiego de mercaderías e insumos y como constancia de su importancia es su pozo artesanal de agua dulce. Es gracias a la conservación del Cerro BATIPA y sus vistosos árboles de mango lo que da fe de una ancestral actividad humana en la zona.